Sobre el folleto “Hay alternativas” de Vicenç Navarro, Juan Torres y Alberto Garzón:
Hay alternativas...
pero sólo si rompemos con el capitalismo
(una aportación al debate)
La crisis económica mundial que estalló en 2008 no tiene visos de acabar pronto. No es una crisis cíclica más. Ha cambiado totalmente el “clima” político mundial. Todo en ella ha sido desmesurado: tanto la bancarrota de bancos que estaban entre las 100 empresas más grandes del mundo hasta 2007 como el masivo rescate que los gobiernos han concedido a la banca, gastando en ello cantidades mareantes. Unas cantidades que hasta entonces no sólo se negaban para la satisfacción de necesidades sociales sino que ni se soñaba que pudieran manejarse.
En comparación con el ataque frontal contra todas las conquistas de los trabajadores en el que están hoy empeñados los gobiernos europeos, todo el período anterior se ve, por contraste, como si hubiera sido un periodo pacífico de avance social.